Últimamente no tengo ganas de asumir ni siquiera las tareas cotidianas del trabajo y cualquier cosa se me hace un mundo cuesta arriba. Antes no era así. Tenía más voluntad, otra actitud. Aunque también es cierto que las cosas parecían que tenían sentido. Claro que como Nicholas Cage en “Leaving Las Vegas”, que decía que no sabía si empezó a beber porque su mujer lo dejó o lo dejó porque empezó a beber, yo no sé si tenía voluntad y por eso las cosas tenían sentido o como las cosas tenían sentido, yo tenía un actitud aceptable. Supongo que es bidireccional y se refuerza mutuamente. Pero en algún momento ha de estar el punto de arranque, la chispa que desencadene las cosas. Y como no creo que ocurra nada que dé sentido a mi vida, supongo que tendría que poner voluntad y cambiar la actitud. Y se supone que, así, las cosas podrían arreglarse. Pero cuesta un mundo. Si pasara algo aunque fuera mínimamente positivo, podría ser un clavo ardiendo al cual agarrarse para pensar que es el momento para salir del pozo y esforzarse en ello y creer que allí fuera estará el sol esperando. Pero sin aliciente alguno, cuesta un mundo.
Últimamente me echo a llorar enseguida por cualquier cosa, en cualquier lugar, bajo cualquier circunstancia, ya sea en el trabajo, en medio de un seminario en el palacio de la magdalena o en una comida de celebración con alguien a quien adoras. Es muy difícil cuando tienes ganas de llorar ponerte a reír. Supongo que la clave vuelve a estar a medias en que las cosas vayan bien y que tu cabeza reúna a las neuronas graciosotas para que hagan acto de presencia y echen a las lloronas. Pero cuesta un mundo, porque las segundas están cómodamente instaladas y las primeras están desparramadas por ahí y andan deprimidillas. Pero supongo que no están muertas. A veces me saca la sonrisa leer los blogs de esa familia virtual tan unida y bien avenida con sede en Madrid, la adorable mencionada arriba, mi gato (casi siempre)….
Últimamente también veo muchos locos sueltos por la calle, que hablan solos en voz alta- y no, no hay ningún móvil de manos libres cerca-, que gritan e insultan a la gente o que se ponen a cruzar los semáforos en rojo y se encaran con los conductores, encima. No sé si es una señal de lo que me puede pasar a mí si no cambio de actitud o si realmente estamos en la época de la historia con mayor desequilibrio mental por parte de los supuestos seres humanos. Cuando hacía selectividad una chica había escogido psicología porque sostenía que todos estaban muy mal de lo suyo y que sería una profesión útil. Claro que como sus posibles clientes crean tanto como yo en los psicólogos y los psiquiatras lo tiene claro. A mí me recetó paroxetina un psiquiatra que parecía contagiado por sus pacientes y los psicólogos mucho hablar y hablar y probar cosas y tal, pero al final la única que tiene la llave para salir del pozo eres tú misma. Para eso te pones una peli argentina de esas filosóficas, te gastas menos dinero y disfrutás de ese lindo asento, viste. O te pillas a alguien con alma de psicóloga y chafardera, alguna amiga, algún familar (mi tía la que no habla valdría para eso y mi prima la que aún habla menos, también). O te inventas un otro yo, más sensato que tú misma y que mire las cosas justo desde el lado contrario. A ver si te ayuda. O sólo sirve para hacerte llorar. En fin, que al final eres tú la que has de hacer las cosas.
Y últimamente me he reafirmado en la idea de que no importa el sitio donde estés o donde vayas sino la gente con la que estés y si te sientes cómoda y a gusto o no. Santander puede estar bien si vas sola a tu bola, de vacaciones y solamente aguantando mínimamente a tu madre. Podría estar de puta madre si fueras con amigas/familiares con quien hubiera feeling; sublime si estuvieras con tu pareja. O puede ser horroroso si vas por trabajo y te sientes un et autista en medio de la gente, aunque vayas a sitios de relumbrón a comer muchos pescados de esos raros y te topes con la nietísima y su churri. Por cierto, en una de esas veces, probé los percebes, que ni idea de cómo coño y qué coño se comía de eso, pero yo, burra provinciana, soy muy precavida, así que esperé, observé a las demás gente y no metí mucho la pata. Claro que luego pusieron un, creía yo, pescado raro blanco enrollado alargado, parecido a un espárrago, y me disponía a comérmelo por las vías normales, porque no creía yo que eso tuviera ya mucho misterio, cuando veo que la gente lo desenrolla y se lava las manos con él. Sí, era una toallita cálidamente calada porque los percebes se comen con las manos y te ensucias. Claro, ¿no? Pues yo lo vi oscuro. En fin, una que es torpe y no tiene mundo.
Termino. En las fiestas de la mercè este año hay un concierto –gratis- bastante atractivo desde mi point of view, en pl. catalunya, el 23 de septiembre por la noche: Andrea Corr, El Sueño de Morfeo y Nena Daconte. Bueno, a mí me apetece verlo. Ese mismo día, más temprano, en otro lugar de Barcelona también actúa Travis, grupo al cual he visto que homenajeaba cyllan en su blog. A mi me gustan estos conciertos de la mercè, porque son gratis y porque siempre suele ir gente buena, aunque últimamente la mayor parte de ellos los trasladan al forum, esto es, a tomarporculo. Pero los referidos son en un lugar céntrico. Allí vi también, por ejemplo, a Revólver o Amaral en otros años.
Pongo el video de idiota de nena daconte (remix). Me encantan los peluches del cerdo y del león. Curiosidad: un día vi que en “basquetmania” Juan Carlos Navarro la elegía para acompañar jugadas suyas. Ay, cómo echamos de menos a La Bomba en el Eurobasket, ojalá participe ya, y que el tropiezo de ayer sea el único que tengamos.
jueves, 6 de septiembre de 2007
últimamente
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
Salir del pozo, salir del pozo....una patada en el cul y sales dispará p'arriba com un coet! Si yo no hago el jabalí tu tampoco!!! ;-)
Cierto que la llave la tienes tu misma, y la chispa y el motor de arranque seguramente también...la actitud y obligarse a pensar en positivo.
Y que hay días de todo y momentos para todo. Somos seres muy complejos...
No se que más decirte....que ahí estamos y a ver lo que sale!
Saludos!!
Hola por aquí. Jeje, has puesto lo de travis ;)
Venía a saludar y me encuentro "otra" entrada pesimista, mmm, ¿qué le pasa con el mundo señora? No tiene porque contárselo a una casi desconocida pero es que me intriga esa actitud persistente a lo largo de los meses.
Ánimo tía ;)
Peluchesssssssssssssssssss,ayxxxxx ¡¡que vicio tengo con los peluches!!!. yo me agarro a lo que sea, Mac, aunque sea un triste y pequeño pelucho, busca tu clavo que hay que salir a flote como sea. Venga que te quiero ver escribir mas psoitivamente que se que lo sabes hacer.
Publicar un comentario