jueves, 4 de diciembre de 2008

llegará el día

Llegará el día en que empiece a llorar y ya no podré parar jamás. En el lugar más inapropiado, en el momento menos oportuno, sin venir a cuento. Llegará el día en que empiece a llorar y ya nunca seré capaz de frenar mis lágrimas. En medio de alguna clase, ante mi jefe comentando que me aumentan el sueldo, mirando los hermosos ojos verdes de mi jefa… comprando el aipodnanoazulde8gigasmínimo, para mi sobrina para los reyes, ante alguna monería simpaticona de la peque, con un besito del huevón….leyendo cualquiera de tus posts, en medio de cualquier conversación insustancial, entre mis quiero y no puedo, al oír tu voz de princesa rosa al otro lado del móvil… cuando me pongan el cortado de la mañana, cuando pague la eterna cajetilla de marlboro (yo antes no fumaba, ¿qué pasó?), en el paso número diez después del segundo semáforo a la derecha en el camino diario de la rutina…al oír la risa desenfadada de alguien feliz, ante los aplausos, las felicitaciones y las sonrisas que la vida te debe, cuando la seguridad de la desilusión permanente se apodere de mis entrañas…empezaré a llorar y no podré poner fin.

Y me quedaré quieta allí donde sea y sólo me comunicaré con el exterior a base de lágrimas. Y pasarán los segundos, los minutos, las horas…y no sabré parar…y pasarán los días, las semanas, los meses…y moriré. Entonces vendrán los csi’s y un sucedáneo de Grissom preguntará al forense “causa de la muerte” y le dirán “deshidratación ocular” …y vendrá la dra. izzie stevens, con esa cara de empatizar con todo el mundo que tiene y esa sensibilidad suya tan propia (qué buena actriz) y dirá “hora de la muerte”…y recitará de memoria la hora, día, mes y año de mi nacimiento... Llegará el día en que empiece a llorar y ya no podré parar jamás.

Y de hecho, creo que ya está aquí, porque mi gato, que tiene un sexto sentido (bueno, como todos, creo), lleva toda la puta semana acostándose conmigo, en vez de ir a la cama grande con madre. La anterior vez que lo hizo entré en una gran depresión y acabó produciéndose la muerte total y absoluta de algo de lo que ya no hay ninguna vía de resurrección en modo alguno, ni absurdas esperanzas quedan. Muerte total y absoluta de algo... Ante la muerte total y absoluta de alguien mi gato diarrea y lo pone todo perdido y hay que meterlo directamente en la ducha. De momento sólo pasó el día en que murió mi padre. Mi gato tiene un sexto sentido. Es inminente el comienzo del llanto y estoy segura de que me será ya imposible parar.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Necesito hablar contigo, enciende el teléfono, please.

Anónimo dijo...

Podías haber escrito el post sobre la excursión a Montblanc, no? Siempre pones enfasis en lo negativo. Con lo divertido que hubiera sido, sobretodo el momento Macbollix y la Empana apagan las luces de la iglesia de Montblanc. Acuerdate de lo que nos reimos.
Un beso

Anónimo dijo...

¿Regalan plumas en esa iglesia o una las ha de llevar de casa?
(El chiste es malo, pero, qué se puede esperar a las 2 y pico de la madrugada...)

Anónimo dijo...

Pues será que yo a las 9 y pico tampoco estoy muy despierta, porque empana que es una, no pillo el chiste :-)

Anónimo dijo...

Ahora! Después del cafe del desayuno lo he entendido!

Me recuerda un niño que de mayor quería ser torero y le pregunta a su madre ¿pero el toro hay que traerlo de casa o te lo dan allí?
;-)

Unknown dijo...

Hum, ¿seguro que lo has pillado, empaná? Mira que el humor inteligente y sutil de la rana (digo, princesa) rosa sólo está al alcance de los elegidos. La pink panther (esto, princess) juega con lo que se supone que sueltan aquellos como nosotros –bueno, tú no, que eres vichisuas- y con el hecho de que Montblanc es una marca conocidísima (y cara) de plumas estilográficas, osea, pa escribir.

Si no te hubieses cargado el blog, podrías haber escrito tú la crónica del viaje, en vez de tonterías como la del viernes…no te digo más. Y la que pulsó el interruptor y apagó las pocas luces que había en la iglesia, sumiéndonos a todos en la más absoluta oscuridad fuiste tú. Yo sólo formulé una posibilidad en voz alta. ¿Me has buscado ya el pendrive para que te grabe la música de anatomía de grey? No, ¿verdad? mira que estás empaná.

Un beso pa ti y un achuchón (que hay más confianza) pa la reina del humor, que no amor.

Anónimo dijo...

Ay, pues tienes razón, no lo había pillado, poco sutil que es una.
Lo de que me llames vichisuas tampoco me queda claro si estas alabando mi feminidad o minusvalorando mi lesbianidad (¿esta palabra existe?).
Lo del pendrive, solucionado. He ejercido de jefa y le he dicho al encargado de temas informáticos "quiero un pendrive". Para mi sorpresa ha dicho "vale muy bien, mañana te lo compro", así que he añadido "ah... pues que sean dos".
Y sobre blog, ¿para qué necesito yo un blog pudiendo escribir en el tuyo? :-P
Besos