Macbollix, la analfabeta digital, en …el oscuro e intrincado mundo del interné

Me han pasado tres cosas relacionadas con Internet que no sé si son dignas de mencionar, pero es que no estoy lo suficientemente inspirada para actualizar este blog como dios manda. Así que haré un post menor (más menor que los habituales, se entiende).

Cosa 1: Por culpa de la empaná, jijiji, me perdí el último capítulo de la temporada 4 de anatomía de grey. Y pensé, pos es igual, ya me lo pillo de la red. Me vi negra, pero al final lo conseguí. Al principio lo busqué por la mula y me bajé una porno. No se veía, pero se escuchaba, y no hablaba nadie, sólo gemían voces femeninas. Y yo pensé “hum, qué sospechoso me parece que la callie y la erika se hayan puesto a follar como posesas ya; eso puede pasar en la realidad, pero no en una serie de una cadena importante de USA que ve todo el mundo”. Total, que como no era lo que buscaba, lo borré. Luego lo busqué por enlaces torrent y me bajé el programa utorrent ese para descargarme el enlace y tal. Bueno, no sé muy bien cómo lo hice, pero en tres horas tenía el capítulo en mi pc. Se escuchaba al alex y la izzie pero no se veía nada. Y leí no sé qué de codecs que me faltaban, pero también leí que el VLC player lo entiende todo, da igual en qué código le ponga el audio o el vídeo. Así que me lo bajé y, voilà, vi tranquilamente el capítulo. Que la verdad se nota mucho el bajón que ha pegado la serie, la cuarta temporada fue peor y terminó mucho más sosamente que las anteriores. Sospecho que la están alargando ya cual chicle sin sustancia.

Cosa 2: La nena, uséase yo, ya se emocionó y pensó “pues ya no voy a ver la tele, me voy a bajar las pelis y series que me dé la gana y lo veré cuando me salga del santo higo, haré un visionado a mi medida y no a la medida de las huevonas de las cadenas en abierto que son capaces de ponerte dexter entre semana de madrugada. Y leyendo un poco más hasta podré bajar las cosas en VOS con subtítulos, que mola más y te permite seguir las series en cuanto salen al aire y…”. Sí, ya sé que suena a analfabeta que te cagas y que esta madre del cordero ya la habíais descubierto vosotras el siglo pasado. Pero es que una es lenta y hasta ahora sólo usaba el interné, en ese aspecto, para la música, mula mediante. En ésas estaba. Pero un día en el trabajo me puse a mirar enlaces torrent a diferentes cosas, en uno de esos arranques compulsivos de navegación que me dan cuando me agobio, y entro y salgo de páginas y a veces leo, y a veces no. Y, de repente, el cabrón del ordenador me dice que estoy infectada de espías y de no sé qué y que me baje el xp2009antispyware. Y yo, ¿he dicho ya que soy una analfabeta digital?, pensé “ostias, ostias, ¿qué has hecho mac?, joder, joder…” y me lo instalé. Y me cargué el ordenador. Porque es un virus o malware o rogue o su puta madre. Y el técnico ha dicho que como ya tenían pensado renovar ese pc, pues que pasa de intentar arreglarlo, porque es complicado y lleva tiempo y que ya me comprarán otro y mientras, estoy de okupa en un ordenador que he pillado. Yo, la verdad, es que si fuera la gerente de mi trabajo, hacía que el pc lo pagara la macbollita de su nómina, por gilipollas. Con lo protegidos que estamos en el trabajo. Y me pongo yo a bajarme protección adicional, hombreporfavor. Que además olía a la legua que era un virus. Total, que si os sale algo como a mí, le gritáis al ordenador “tu puta madre sí que está infectada, imbécil” y pasáis de él. Y, en fin… ahora se me han pasado las ganas de descargar cosas y verlas y eso. Porque con lo torpe que soy… a ver si me cargo el pc de casa. Y además, total, si no hay tiempo… hay más longanizas audiovisuales que días y una también lee novelas y escribe tonterías como éstas y piensa y existe, y…

Cosa 3: Supongo que ya sabéis que existe la posibilidad en Google maps de ir a la opción “street view” y… echar un vistazo a las calles (¿se nota que sé algo de inglés, eh?). Se ve que los fulanitos de Google han ido por Madrid, Barcelona, Sevilla y Valencia en coches, grabando en un momento dado (creo que en mayo) todas las calles y ahora tú lo puedes ver y pasearte virtualmente. Antes ya existía esa posibilidad en otras ciudades de otros países (yo no tenía ni idea, si no ya me habría paseado por todo San Francisco, Nueva York, Los Ángeles, París, Roma… o no, que no hay tiempo). Y desde este lunes está disponible en esas 4 ciudades de España. Pos bueno, yo ya he estado chafardeando, he vuelto a Madrid, a Sevilla y se ve todo, todo. Y puedes decir, mira aquí esto, o aquí lo otro. Y también he paseado por Barcelona y tal. Pero lo mejor es que cuando grababan también pillaban a la gente que estaba por allí. Salen con la cara distorsionada, pero se nota, si los conoces, quienes son. Pos bien, me fui yo a ver mi bloque, mi calle, mi barrio, me di un voltio y pensaba yo pa mí misma “mi tía la que no habla fijo que sale hablando con alguien o con el móvil en la oreja”. Pero no la vi, qué raro, claro que por la pinta de las fotos, debía de ser mediodía y estaría trabajando o tomándose un café en algún bar. Para mi sorpresa, sin embargo, en la confluencia de dos calles, cerca del metro, vi a… madre. Con su falda tejana, su suéter de cenefas raras de mangas largas arremangao, su bolso cruzado en los hombros, sus zapatillas “qué bien se andan con éstas” negras y sus andares característicos (quicir, de pato); en la calzada, no en la acera (“es que había obras, coño!”) y chupando cámara, como es menester. Vendría del médico, de cogerse la tensión o vete tú a saber, porque no llevaba ninguna bolsa en las manos, e iría a casa. Ella dice que no recuerda ningún coche echando fotos en ningún momento de su vida callejera. Con el cante que daba, véase instantánea . En fin. Así que ya, para la posteridad supongo, madre estará siempre andando entre esas dos calles. Qué curioso.