comentando la actualidad

La Actualidad 1: Perdimos la final del eurobasket. Nos lo merecimos. Digo perder. España jugó fatal, peor que los rusos, que no hicieron nada del otro mundo. Parecía en los primeros 5 minutos que España ganaría fácil pero luego se durmieron y fallaron hasta decir basta. Navarro 0 puntos, Gasol metiendo menos de la mitad de los tiros libres. Balones perdidos tontamente. Sin ideas en ataque más allá de pasársela a Pau. Ay. Tal vez si no hubiera jugado, igual que en la final del mundial, hubiésemos ganado. No sé, no sé. ¿Y por qué no se echó el equipo a las espaldas en los últimos minutos Calderón, mi extremeño favorito, si era el único acertado? En cualquier caso es la mejor selección española de todos los tiempos y casi de todos los deportes. Esperemos que el año que viene también repitan medalla (de lo que sea, es igual) en los JJOO. Y acabando con los deportes: llevamos sólo tres jornadas de Liga y el Madrid ya está con el Barça 4 puntos por debajo, jejejeje. Que sigan así y sólo tendremos que preocuparnos (y mucho) del Sevilla.

La Actualidad 2: Se han entregado los Emmys, que son como los oscars de la tele. Anatomía de Grey ha ganado un premio. No, no ha sido el de mejor serie dramática, que ha ido a parar a Los Soprano, como homenaje póstumo a una gran serie. Sino para Katherine Heigl como actriz secundaria (venciendo a sus compis Sandra Oh y Chandra Wilson, esto es, la china y la negra). ¿Y quién coño es la como se llame esa? Pues la tía buenorra del vídeo (con canción de Travis incluida).

Mi Actualidad 1: Pues me acabé de leer “La sombra del viento”. El libro en sí no está mal, pero el final es espeluznantemente malo. Todo sale bien. Incluso el payasín del prota sale vivito, coleando y feliz, cuando páginas atrás adelanta que se moría. Hombreporfavor, qué tomadura de pelo. Si dices que en una semana estarás muerto, coño, muérete, tío! En fin, a mí esto de los finales felices forzados así para que los lectores queden con buen sabor de boca no me gusta nada, ni que apelen a un sentimentalismo tipo “el diario de patricia”. A mí me gustan los finales inteligentes, sorprendentes y si puede ser negativos, mejor; los giros argumentales; que si ponen dramatismo sea un poquito adulto y no de telefilm barato; que los malos y los buenos no estén claramente separados; que se eche mano al humor, aunque sea negro, o que se choteen de sí mismos, porque al final la ficción no es la realidad y no hay que tomárselo tan en serio. No me gusta que las cosas sean como las telenovelas, que sólo me hace falta preguntar a madre quién es el tío y la tía protagonista y quiénes son los buenos y los malos para saber cómo va a ser el final. Yo le digo “pues en el último capítulo estos dos se casan, que lo sepas y a la mala la matarán” y ella dice “yaaaaaaaaa”. El final feliz cantado y el sentimentalismo casposo, eso es lo que le atrae. Como ventaja tiene que se puede echar la siesta cada día: ve los tres primeros minutos de la primera telenovela, se pone a roncar de esa manera escandalosa que tiene, se despierta, ve los dos últimos minutos de la segunda telenovela y aún así no se pierde en ninguna de las dos. En fin. Ahora empecé “La catedral del mar”. Macbollix, siguiendo con los best-sellers pasados.

Mi Actualidad 2: A veces sueño con aviones. Freud diría que eso significa deseos de relaciones sexuales. Pero todos sabemos que Freud era un obseso y un guarro. Y además, no sueño exactamente con aviones, sino con aeropuertos y la ilusión que me hace ir allí y esperar un vuelo e irme a algún otro lugar rapidito (me mola más las idas que las venidas, eso sí). Y por otro lado, mis sueños no son mientras duermo, sino más bien cuando estoy despierta y la mente se me va. A pesar de todo, alguna lectora arrugará la nariz y pensará que soy un caso típico freudiano. Bueno, que piensen lo que quieran, yo me voy a tomar una cerveza y a entretenerme quitando la etiquetilla de la misma. Esa nariz!